Pocos constructores de motos tienen el prestigio que acompaña a Maxwell Hazan y, con su último proyecto, ha vuelto a superarse. El creador californiano, reconocido en el mundo de las preparaciones artesanales por su obsesiva atención al detalle y sus diseños de estética atemporal, ha presentado la que ya muchos consideran su obra más ambiciosa: una moto hecha a mano con motor V8 de Ferrari.
La máquina en cuestión se llama HF355 y está impulsada por el corazón de un Ferrari F355, uno de los deportivos más icónicos de los años 90. El bloque, un 3,5 litros atmosférico que originalmente empujaba al deportivo italiano hasta los 295 km/h, entrega 375 CV. Ahora, ese mismo motor ha sido instalado en una moto que apenas supera los 220 kilos de peso. El resultado: una bestia única.
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Un proyecto sin precedentes
El desarrollo de la HF355 ha sido documentado durante más de un año en la cuenta de Instagram de Hazan Motorworks. A lo largo de este tiempo, se han mostrado los avances de una construcción completamente artesanal. Desde el depósito de aceite hasta el basculante o el chasis, cada componente ha sido diseñado y fabricado a medida. Nada se ha comprado hecho.
El motor Ferrari actúa como parte estructural del chasis, lo que ha permitido reducir peso y mantener la rigidez del conjunto. Además, el diseño de la parte ciclo incluye soluciones poco convencionales, como un amortiguador trasero horizontal de Öhlins, un basculante tipo underslung y un colín que hace también de depósito de combustible.
Estéticamente, la moto es tan agresiva como minimalista: carrocería baja, neumáticos slick, frenos Brembo 'pata negra', descomunal horquilla Öhlins y manillares tipo clip-on. Y, por si fuera poco, un sistema de escape SC Project que hace rugir el V8 como si siguiera montado en un Cavallino rampante.
Más que una locura mecánica
Lejos de ser una excentricidad para llamar la atención, la HF355 representa la filosofía de Hazan: mezclar belleza, rendimiento y creatividad mecánica con una ejecución impecable. Sus creaciones anteriores ya habían sorprendido al mundo (algunas con precios que superan los 100.000 dólares y coleccionistas como Jason Momoa entre sus clientes), pero esta marca un nuevo nivel.
En estos momentos, la HF355 se encuentra en fase de ajustes finales. El motor ya ha arrancado con éxito y ha pasado por el banco de potencia, aunque Hazan todavía trabaja en aspectos como la carrocería definitiva, la instrumentación y la ergonomía. No se han publicado cifras oficiales de prestaciones, pero basta con escuchar cómo suena en los vídeos compartidos para intuir lo que se avecina.
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Una pieza única que hace historia
Más que una moto, la HF355 es una pieza de ingeniería única, una escultura funcional que combina lo mejor del diseño artesanal con el rendimiento de una mecánica legendaria. No está pensada para producción en serie, ni falta que le hace: será una pieza única que, seguramente, acabará en manos de algún coleccionista que sepa valorar lo excepcional.
Con esta creación, Maxwell Hazan no solo ha puesto un Ferrari sobre dos ruedas. Ha firmado un nuevo capítulo en la historia de las preparaciones personalizadas, demostrando que aún quedan formas de sorprender en el mundo de la moto sin perder el equilibrio entre locura y maestría.
