Aunque esta noticia no sea sobre motos, sino de coches, nos interesa a todos. Y es que la firma de automóviles Ford ha presentado una patente en la que describe un sistema denominado 'Systems and Methods for Detecting Speeding Violations', es decir, ‘Sistemas y métodos para detectar violaciones de exceso de velocidad’. Lo que significa que podría hacer que sus coches se conviertan en ‘chivatos’ cuando otros cometen excesos de velocidad.
La patente, aunque ha salido a la luz ahora, fue presentada en enero de 2023. Y con las patentes ya se sabe, puede que algún día se hagan realidad y puede que queden en el olvido, pero esta sin duda nos ha llamado especialmente la atención porque abre un mundo de posibilidades.
En una ocasión ya te hablamos de los radares privados de Francia, con los que los conductores se podían sacar un buen dinero denunciando al prójimo, pero lo de Ford va a un paso más allá, porque se trata de un sistema que sus coches podrían montar de fábrica.
Si te pasas, me chivo
El idea de Ford es que sus coches sean capaces de monitorizar la velocidad a la que circula el resto de vehículos que le rodean. Y si capta a alguno que sobrepasa los límites legales, utilizaría sus cámaras para fotografiarlo. Todo en base a la zona en la que se encuentra, con medidas de geolocalización, y sensores que confirmarían la velocidad a la que circula ese vehículo infractor.
Y claro, esto no se haría por gusto, sino con el fin de enviar de manera automática un aviso a la policía reportando el exceso de velocidad del vehículo captado, con todos los datos necesarios para que se pueda procesar una denuncia.
Sabiendo esto, se podrían utilizar coches Ford privados como vehículos de vigilancia camuflados, más discretos incluso que los vehículos camuflados que utiliza la policía o la Guardia Civil de Trafico actualmente, pues sería imposible diferenciarlos de los demás. Además, estos nuevos vehículos captarían la velocidad mientras que ellos mismos van circulando, por lo que podrías dudar de cualquier Ford que te cruzases en tu camino.
De momento es solo una patente, puede ser que nunca se haga realidad, pero solo plantear esta posibilidad ya abierto un debate sobre si un sistema de estas características podría ser legal o no, por meras cuestiones de privacidad. La normativa puede ser diferente en cada país por lo que, quién sabe si no llegará un día en el que todos miremos con desconfianza a los coches de la firma estadounidense.







