El único piloto que podría evitar este fin de semana el alirón de Marc Márquez en MotoGP es, precisamente, su hermano Álex. No lo tiene fácil el piloto del Gresini Racing, ya que con que Marc sume tres puntos más que él en el cómputo de todo el fin de semana se llevará la corona de la categoría reina.
Álex Márquez llega al circuito en el que consiguió en 2013 su primera victoria en el Mundial, en aquel momento en la categoría de Moto3. También venció en 2014 (Moto3) y 2017 (Moto2), por lo que guarda muy buenos recuerdos del trazado japonés. El año pasado abandonó tras un toque con Mir en la primera vuelta, si bien había terminado séptimo en la carrera sprint. De cara a este año, con la Ducati GP24 las expectativas son más altas: «Aquí me salté el 2023 y llegué un poco a ciegas con la Ducati. Me costó un poco, pero estaba en Q2, no fue un fin de semana desastroso. Confío en que la GP24 me ayudará un poco en esas frenadas y en tener más contacto en el tren trasero y poder parar más la moto que con la GP23. Y a partir de ahí, ver dónde estamos y a qué podemos optar el domingo».
Foto: Red Bull Content Pool
«El 'modo subcampeón' es, de alguna manera, intentar retrasar el título de Marc»
Álex ha sido noticia en los últimos días después de que se confirmase oficialmente que Ducati tendrá cuatro motos oficiales en 2026, las tres que tienen este año (Marc, Bagnaia y Di Giannantonio), y una más para él y para el equipo Gresini. Esto decía sobre la confirmación de la GP26 de la que dispondrá el próximo año: «Creo que si alguien la merecía, más allá del año que estoy haciendo, es el equipo Gresini. Si miras el historial desde el primer año que llegaron con Ducati, que hicieron un gran año con Enea (Bastianini). Al año siguiente entré yo y estuvimos luchando por victorias, y ganó una Di Giannantonio. Estuvimos ahí. Con Marc el año pasado eran la referencia con la GP23 y este año estamos siendo, junto al equipo oficial, la referencia. Era importante dar ese paso. También sé que es una responsabilidad, pero lo cojo más como una oportunidad de crecer como equipo, pero sobre todo como piloto al tener las armas, y también con la responsabilidad de probar cosas en test, estar ahí y que te dejen probar cosas», explicaba ante los medios que se encuentran en Japón.
Y sobre la posibilidad de evitar el alirón de su hermano, pero pensando también en medir los riesgos para su lucha por el subcampeonato, el ilerdense destacaba que «el 'modo subcampeón' es intentar, de alguna manera, retrasar ese título, porque eso quiere decir que habremos hecho un buen fin de semana en Motegi. Poder retrasar una carrera más el título va a querer decir que hemos hecho un gran fin de semana. No pienso en eso. Tarde o temprano Marc va a acabar ganando ese título. Yo voy a intentar hacer lo máximo que pueda este fin de semana, y a partir de ahí veremos a qué podemos optar el domingo, que vendrá del trabajo que hagamos viernes y sábado», zanjaba el segundo clasificado del campeonato.
