Por si no habíamos tenido suficiente con la llegada de la nueva Yamaha YZF-R1 a nuestras vidas, parece que los planes de la casa de Iwata no se quedan ahí. Y es que desde Estados Unidos hemos conocido que Yamaha tiene previsto poner en el mercado una tercera integrante de la nueva saga R1, que en su caso llevaría el nombre de Yamaha YZF-R1S.
Sin duda que una de las grandes sorpresas que pudimos ver en el pasado Salón de Milán fue la puesta de largo del modelo superbike de Yamaha 2015, iniciando así la quinta generación de una deportiva de ensueño, que con su última incorporación han vuelto a rizar el rizo de manera espectacular, con un modelo renovado y equipado con tecnología MotoGP.
En EICMA observamos que Yamaha había fabricado dos versiones de una misma moto, siendo la R1 la versión preparada para calle, mientras que la R1M se trataba de una versión especial para circuito, la que muchos equipos de competición han solicitado para sus respectivos campeonatos.

Este es el registro del CARB en EEUU, donde se pueden ver seis modelos diferentes (3 de la R1 en sus 3 colores disponibles, la R1M y dos de la R1S). FUENTE: motorcycle.com
Sin embargo, lo que nadie sabía es que había una tercera integrante en discordia. La información nos ha llegado procedente de Estados Unidos, donde la Junta de Recursos de Aire de California (CARB) ha certificado la existencia de esta tercera versión, cuyo nombre comercial probablemente será Yamaha YZF-R1S. Sobre esto, hay que explicar que en el país norteamericano las restricciones para este tipo de motos varían con respecto a Europa, de manera que esta moto podría venderse sólo en EEUU y no en el Viejo Continente, aunque todo son especulaciones.
Según las reflexiones que nos llegan desde el otro lado del charco, la tercera en discordia sería una moto con menos equipamiento tecnológico. Se habla de que podría eliminarse la Unidad de Medición Interna, que se encarga de medir los diferentes movimientos que se producen encima de la moto, así como la supresión del acelerómetro, que se reemplazaría por otro sistema de control de tracción más sencillo.
Estas medidas se traducirían en menos de potencia, pero también en un precio menor, situándose a medio camino entre la R6 y la R1. Parece que Yamaha ha querido dejar que el éxito de su nueva deportiva haga mella entre todo el público para después deleitarnos con un postre que seguro estará a la altura de las expectativas.
Fuentes: Motorcycle.com y TheRideAdvice