91 años y en moto de carreras
Rochelle Simms, de nada menos que 91 años, ha querido vivir una experiencia memorable y excitante. A pesar de su avanzada edad, ha podido dar una vuelta como pasajera de una moto de carreras pilotada por un piloto profesional.
Si ya es raro ver a una persona de 91 años en moto, más aún es verla en una moto de carreras. Es el caso de Rochelle Simms, una mujer que el pasado fin de semana tuvo la oportunidad de ir de pasajera durante una vuelta en una moto pilotada por el expiloto del AMA Superbike, Chris Ulrich.
La nonagenaria es miembro de la junta directiva de una empresa de comida americana que es patrocinadora del equipo M4. Como le gusta la velocidad («bajo control», matiza), pidió tener una experiencia memorable y le consiguieron una moto para ir de paquete a gran velocidad.
Seguro que fue para recordar. «Sin palabras», afirma al bajarse de la Suzuki. «Una experiencia salvaje» y además «no me arrepiento». No nos extrañaría volver a verla en ésta u otra experiencia...