Invertido de Oliveira con la KTM
Miguel Oliveira se llevó el gran susto de los test de Valencia en plena adaptación a los frenos de carbono de una MotoGP. Invertido del portugués que afortunadamente se quedó en anécdota.
La potencia, la electrónica y los frenos son los tres elementos en los que más incide un debutante cuando se sube por primera vez a una MotoGP. Es lo que más impresiona y "preocupa" a los rookies, ya que el contraste es radical con lo que se han encontrado en las categorías previas.
En lo referente a los frenos, toparse con el sistema de frenos de carbono que equipa una MotoGP es un cambio drástico al que hay que ir adaptándose. «Esta moto tiene mucha potencia, pero frena tanto que las referencias son las mismas que en Moto2», nos decía Fabio Quartararo después de sus primeros test con una moto de la categoría reina.
Quien comprobó en sus carnes lo mucho que frenan fue Miguel Oliveira, que protagonizó el 'sustazo' de los test nada más salir a pista en la segunda jornada de entrenamientos.
Cuando fue a echar mano al freno delantero al llegar a la curva 2, la rueda trasera se levantó demasiado y estuvo a punto de irse al suelo tras este invertido. El portugués no tardó en darse cuenta de la capacidad que tiene el sistema de frenos de una MotoGP...
Those carbon brakes have some stopping power! 😳#MotoGP rookie @OliveiraMoto2 was almost launched from his new @KTM_Racing RC16 on his out lap! 😮#ValenciaTest pic.twitter.com/zpNMOgy036
— MotoGP™🏁 (@MotoGP) November 21, 2018