Cursos de conducción en moto de Villarace. Os contamos los trucos que aprendimos en una jornada sobre una pit-bike.
Asistimos al centro de formación Villarace para recibir uno de sus cursos de perfeccionamiento de la conducción y poder traerte aquí los mejores consejos aplicados a la conducción en carretera. Posición sobre la moto, trazadas, reparto de pesos... Todo ello practicando en un entorno en el que si te vas al suelo, no pasa absolutamente nada.
Evidentemente donde más se nota la efectividad de estos cursos es en una conducción deportiva y en circuito. Pero hemos aprendido muchísimas cosas de nuestros amigos de Villarejo de Salvanés, y muchas de ellas esenciales para una conducción segura en carretera, así que hemos decidido resumir en este post cinco de las lecciones más importantes que hemos aprendido pilotando una pit-bike.
La posición sobre la moto
Una correcta posición de tu cuerpo mejorará tu conducción y seguridad sobre la moto. Las tres claves principales son; brazos semiflexionados, estribos bajo la mitad delantera de los pies y manetas a una altura en la que el brazo esté casi alineado con la mano.
Comencemos por el principio antes de ponernos en marcha. Los brazos has de llevarlos estirados, pero no del todo, semiflexionados. Si los llevas muy recogidos puedes fatigarte antes y si los estiras del todo bloquearás la articulación del codo, y en ambos casos la conducción será bastante incomoda y limitada en tus movimientos.
Las manetas deben estar reguladas según cada piloto. Para ajustarlas puedes subir la moto en el caballete y simular tu posición normal de conducción. Así podrás regular la altura de las manetas de manera en que la parte superior de la mano y la línea del brazo queden casi alineadas. Esto te ayudará a accionar fácilmente las manetas y tener un buen agarre sin sufrir molestias o calambres por malas posturas.
Y por último los pies. Puede ocurrir por desconocimiento o por simple pereza que tiendas a posicionar los pies muy adelantados en los estribos y con las puntas bajas, lo que provoca una mayor dificultad al accionar el freno o las marchas y dificultará tu conducción. La distribución de pesos y la agilidad en la conducción mejora si situamos la estribera en la parte delantera del pie. Nos ayudará tanto a cambiar de posición en las curvas como a utilizar eficazmente las palancas.
Las trazadas
Comenzar tomando una curva por el exterior casi siempre es lo más inteligente. Aunque te parezca que aproximándote a la curva por el interior tienes más metros para frenar, un ángulo de giro muy cerrado puede hacerte salir recto o incluso acabar en el suelo.
Parece obvio que, salvo excepciones, la mejor forma de tomar una curva es entrar desde el lado exterior. Pero mucha gente piensa que por el interior tiene más metros para frenar o que así se aleja de los vehículos del carril contrario, pero ésto va perjudica drásticamente al ángulo de giro.
Para tenerlo más claro, la secuencia de acciones es la siguiente: entrar desde el exterior, frenar mientras está la moto recta, soltar los frenos e inclinar hacia el interior de la curva para salir de nuevo por el lado exterior del carril acelerando suavemente.
Como se aprecia en la ilustración, con una buena trazada se amplia el radio de giro, por tanto, ante una situación de emergencia tendremos un mayor margen de inclinación para poder tumbar más la moto. Además, generalmente tendrás mayor visibilidad en carretera al afrontar una curva desde el exterior.
La mirada
Fijar la mirada muy cerca de la moto es un error bastante común. Mirar más lejos y buscar la salida de la curva te ayudará a trazar mejor, a mejorar tu posición en la moto y a aumentar la capacidad de reacción.
Acostumbrarse a mirar “lejos” es una buena práctica por varios aspectos. El más obvio es que podrás anticipar mejor lo que te venga, ya sea una curva, un bache o cualquier vehículo que te encuentres en el camino. No se trata de mirar lo más lejos que puedas, sólo levantar un poco la vista para poder reaccionar con más tiempo y ampliar tu campo visual.
Otra recomendación importante es marcar bien el giro de la cabeza al mirar hacia el interior de la curva, anticipando la salida y ayudándote así a mejorar la posición de tus hombros, lo que te hará girar más y mejor.
Por último, quiero hacer hincapié en un instinto básico que todos tenemos al afrontar un imprevisto; fijar la vista e ir hacia él. Vaya, que nos ponen delante un capote y allá que vamos. Seguro que alguna vez habrás pensado eso de “me voy recto”, y no puedes evitarlo. Esto se debe a que nuestro instinto es fijar la vista en los peligros que vemos y, como acostumbramos a conducir hacia donde estamos mirando, nos bloqueamos y nos vamos directos hacia allí. Por esto suceden infinidad de accidentes a diario, y por ello es esencial ante un imprevisto esforzarte en mirar siempre hacia donde quieres que vaya tu moto.
Uso de los frenos
El freno trasero para muchos es el gran desconocido, pero aunque parezca poco útil, al usar los dos frenos simultáneamente se reduce de media un 40% la distancia de frenado.
Son muchos a los que el freno trasero les suena sólo de verlo en el libro de la autoescuela. De hecho, muchos aficionados ya con cierto nivel y habituales en tandas en circuitos afirman no usarlo nunca. Pero párate un segundo y piensa en cuánta superficie de tu rueda delantera puede hacer contacto con el suelo; más bien poca ¿verdad?. Por ello es tan importante usar simultáneamente ambos frenos.
Aunque frenar con efectividad no es una tarea fácil –sobre todo en motos que no equipan frenos ABS– lo más recomendable es que dediques tiempo a practicar en una zona aislada del tráfico, para que puedas aprender a frenar fuerte sin llegar a bloquear la rueda.
El reparto de pesos
Cambiar la posición lateralmente en las curvas no sólo está reservado para los circuitos. Desplazar peso hacia el centro al inclinar mejora la estabilidad y te ayuda a girar la moto en curva.
El ejemplo lo tenemos bien claro en MotoGP. Si te fijas en el estilo de conducción de época de las 500cc y lo comparas con las carreras actuales, verás que la tendencia ha sido la de sacar cada vez más el cuerpo hacia dentro de la curva y más cerca del suelo. Con esto se consigue cambiar el centro de gravedad de la moto para mejorar la adherencia. ¿Te suena a chino? Bueno, básicamente es que al inclinar, la zona de contacto de la rueda con el suelo no está en el centro, y entre otras cosas, desplazarte ayuda a aumentar la adherencia del neumático.
Para hacerlo lo más recomendable es cambiar la posición en que estás sentado antes de comenzar a inclinar, desplazando el trasero hacia el mismo lado hacia el que vayas a inclinar. Sacar el cuerpo en mayor o menor cantidad dependerá de la velocidad que lleves, pero aunque vayas de “dominguero”, puedes probar a moverte un poco y cargar más peso en el estribo del interior para ayudar a que la moto gire en la curva.
Los cursos de Villarace
Bueno, esperamos que estos cinco consejos puedan serte de ayuda. Está claro que el aprendizaje en moto es infinito, y quizás algunas de estas ideas no te quedarán del todo claras sin que alguien te las muestre en persona. Por ello nuestro mejor consejo es recomendarte uno de estos cursos.
La oferta de cursos de conducción es muy variada por todo el territorio español. En nuestro caso, pasamos una estupenda jornada aprendiendo a mejorar nuestra técnica junto a nuestros amigos Iván Garrido e hijo, con un paquete de clases prácticas y teóricas, grabación en vídeo, motos y monitor por unos 140€.
Os invitamos a conocer a nuestros compañeros de Villarace y su amplia oferta de formación para niños y adultos en su web Villarace.com o escribiendo a [email protected].