Toda una obra de arte
En ShifCustom han llevado hasta el extremo cada uno de los detalles al dar forma a una de sus últimas creaciones: la R18 / R3. Una moto de tres ruedas creada sobre una BMW R 18 e inspirada en el icónico BMW 328.
Que una moto tenga tres ruedas ya no es algo tan especial. Antes era una rara excepción cuando el tren delantero tenía dos ruedas y no solo una, pero ahora ya se fabrican hasta en serie. Sin embargo, el equipo de ShifCustom ha ido hasta un extremo nunca visto con su R18 / 3R. Un cliente gran admirador de BMW, y en concreto del icónico BMW 328, se le antojó tener una BMW R 18 inspirada en el clásico coche alemán, y este es el resultado.
Esta espectacular R18 / 3 R es obra del galardonado taller ShifCustom de Yuri Shif, ubicado en Minsk (Bielorrusia). Y si alguna vez hubo un estilo que encajara con el monstruoso motor bóxer de 1.802 cc de la R 18, sin duda es este. El equipo de 15 personas de ShifCustom diseñó el chasis y formó la carrocería internamente, confiando en los proveedores del mercado de repuestos solo para un puñado de piezas y subcontratando solo el trabajo en cuero.
En un caso como este no solo es necesario crear toda una carrocería exterior que modifique las formas de la moto original, sino que todo el tren delantero ha de ser hecho prácticamente desde cero. La mayor parte de la ingeniería está escondida sobre el nuevo capó de la R 18, y si lo abrimos, allí encontraremos un bastidor auxiliar delantero hecho a medida, atornillado al chasis principal a través de placas de montaje reforzadas y que sostiene un sistema de suspensión independiente de doble horquilla. Evidentemente, toda la configuración se diseñó digitalmente para que todo quedará en su sitio de forma precisa. Los amortiguadores son ajustables y las ruedas empleadas son las de un Audi A3 modificadas, equipadas con frenos Nissin.
Donde no se utilizó tecnología digital fue a la hora de darle forma a la carrocería, pues se siguieron técnicas automovilísticas tradicionales. Sin duda, una de las características más llamativas es el alargado frontal de aluminio, un claro guiño al 328 con sus parrillas delanteras dobles en forma de riñón.
Se ha cuidado hasta el último de los detalles, desde el emblema de BMW en el frontal hasta las rejillas de ventilación superiores y laterales. Si te fijas y miras bien las ruedas, verás que se ha seguido hasta el mismo estilo de tuercas que en el antiguo 328.
El capó se abre en dos secciones y para ello no hay más que abrir los cinturones de cuero que lo mantienen cerrado. Una vez abierto queda accesible toda la parte delantera y algunos de los componentes electrónicos. Para la iluminación se han empleado dos faros de Harley-Davidson V-Road montados en carcasas hechas a mano. Detrás, la rueda trasera, obviamente, también se ha modificado.
Por tener tenemos hasta un sistema de sonido con conexión Bluetooth que se puede controlar a través de un control remoto en el manillar. Un bolsillo de cuero ubicado en la parte superior del depósito ofrece un espacio donde llevar el teléfono móvil, con carga inalámbrica integrada. También se han cambiado los intermitentes y de hecho los traseros hacen tanto de luces indicadoras como de pilotos traseros.
El trabajo de pintura también ha sido meticuloso y sorprendente. La combinación de plata y azul es todo un clásico de la marca, y es algo que se ha llevado incluso a las culatas como a los silenciadores. Estamos sin duda ante una pieza única, pero… ¿imaginas que BMW tomase nota y la llevase a la realidad para sus clientes más exigentes?
