QJ SRV 125 2023: prueba y opinión
Probamos la nueva QJ SRV 125 2023, la custom de baja cilindrada del grupo QJ Motor, una pequeña gran custom que ofrece unas prestaciones sin igual bajo una estética muy cuidada. Acudimos a su presentación nacional para conocerla mejor y a continuación te contamos nuestras sensaciones.
La QJ SRV 125 2023 en 5 tweets
- Espectacular velocidad máxima (135 km/h).
- Gran diseño y estilo custom, elegante y bonita.
- Consumo excepcional.
- Precio muy competitivo
- Si quieres más información de esta moto, entra en la ficha técnica de la QJ SRV 125 2023.
La QJ SRV 125 es la nueva custom del grupo QJ Motor para este año 2023, siendo además una versión reducida de su hermana mayor la QJ SRV 300. Es una moto custom con un diseño sencillo pero atractivo y accesible, y con una gama de colores que está siendo realmente un éxito.
Podría ser perfectamente la opción ideal y seguramente la más inteligente del mercado para todos aquellos amantes de las motos custom que quieran iniciarse sobre las dos ruedas. De lejos apenas se diferencia de la QJ SRV 300, e incluso tiene cierto aire a modelos de otras marcas de mayor cilindrada algo más constatadas.
El depósito en aluminio, el asiento bien mullido, ancho pero estrecho en su parte delantera, unido a un colín trasero algo más elevado y sobre un redondeado paso de rueda. Óptica delantera redonda tradicional, un buen manillar, buenos frenos y gran motor. ¿Para qué quieres más?
Para conocer mejor esta QJ SRV 125 hemos asistido a su presentación nacional en Tarragona, donde la hemos probado tanto por tránsito urbano, interurbano, incluso carreteras de curvas en la Sierra del Montsant, donde su gran asfalto nos ha permitido disfrutar de ella incluso rascando la parte baja de los estribos.
Equipamiento
- Casco: MT Rapide Pro
- Chaqueta: Spidi Warrior Net 2
- Guantes: Five
- Pantalones: Spidi Furious Pro.
- Botas: Alpinestars SMX Drystar.
Opinión QJ SRV 125
Lo mejor | Podría mejorar |
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Precio de la QJ SRV 125 2023
El precio de la QJ SRV 125 (3.299 €) es una de sus bazas más fuertes, porque a cambio tienes un producto incluso mejor que la competencia en algunos ámbitos, como la frenada ABS, siendo la única custom 125 con sistema ABS. Evidentemente es más barata que su hermana mayor QJ SRV 300 (4.799 €).
Fuera de la marca deberíamos enfrentarla a sus rivales más directos como la Macbor Rockster Flat 125 (2.799 €), la Keeway K-Light 125 (2.490 €), Motron Revolver 125 (2.999 €) o la UM Renegade Sport 125 (2.780 €)
Datos técnicos QJ SRV 125 2023
La QJ SRV 125 no tiene novedades porque se trata de un modelo completamente nuevo, aunque sí está basada en la ya mencionada SRV 300, es decir, no tiene antecedente que cambie o mejore.
Esta SRV 125 es una custom de acceso, con medidas y cotas accesibles, especialmente pensada para usuarios del carnet A1 (ó B con más de 3 años de experiencia), que busquen entrar y disfrutar del mundo custom.
El motor de la QJ SRV 125 es un monocilíndrico de 125 cc refrigerado por agua (pocas custom del mercado cuentan con refrigeración líquida) que entrega 15 cv de potencia (al límite de la normativa) y un par motor máximo de 12 nm. Esta configuración denota un carácter algo deportivo para tratarse de una custom, con más caballos que newton metro, lo que confirma las espectaculares prestaciones que tiene.
En la parte ciclo encontramos un tren delantero conformado por una horquilla telescópica convencional, y en la zaga un doble amortiguador trasero regulable en precarga. Los frenos de la SRV 125 cuentan con un disco delantero de 280 mm y disco trasero de 240 mm, ambos con sistema de frenada ABS (doble canal). Los neumáticos que equipa son:
- Neumático delantero: 90/90-17
- Neumático trasero: 130/90-15
El peso total del conjunto es de 150 kg, y cuenta con un depósito de gasolina de 14,5 L. Está disponible en tres colores; amarillo, negro y naranja.
Prueba QJ SRV 125 2023
Llega la hora de la verdad, llega el momento de subirse a la QJ SRV 125. Tengo que reconocer que tienes la misma excitación que cuando te subes a una Honda CBR1000RR-R pero, si vierais la SRV 125 aparcada sobre su pata de cabra a la distancia, y entornas un poquito los ojos, pareciera que estás viendo una Harley-Davidson Nighster, la última sportster ahora bajo otro nombre. La SRV 125 es bonita, es elegante, es proporcionada, y tiene la línea muy bien ordenada estéticamente. En "otros palabros", no es la clásica ofensa visual que son las otras custom asiáticas del mercado.
Me encanta el diseño del depósito de combustible en la nueva SRV 125, así como los mandos, los estribos, incluso el asiento, gran ejercicio de diseño. Al de los retrovisores como le pille, no le iban a reconocer en su casa, pero bueno, es solo una rosca, no hay que ponerse nerviosos, habrá mil opciones por menos de 40€ en el mercado auxiliar.
Nos subimos a la SRV 125, encendemos y ... bueno, en su configuración de serie lejos de encontrar el bramido grave y acústico de una custom, descubrimos un suave y tenue ronroneo. Al fin y al cabo, estas motos deben pasar las mismas normativas Europeas que el resto, y cada vez son más estrictas, lo que supone sistemas de escape más restrictivos. Pero de nuevo, no nos pongamos nerviosos, esto con cierta modificación aftermarket puede mejorar muchísimo, guiño-guiño.
Tonterías a parte, arrancamos con la SRV 125, y de primeras ya vamos percibiendo la neutralidad de la moto ya que, "todo está en su sitio". Los pies caen donde esperas que caigan en una ergonomía custom, los brazos se tienden lo que imaginas que debe ser su posición natural, y la distancia entre ellos y el asiento igual. Hablando del asiento, cómodo, bien retraído, pero ni alto ni bajo. Máxima puntuación por mis partes.
El primer tramo de la prueba es por zona urbana, donde de nuevo no podemos darle otra que nota que no sea la más alta. Es cómoda, responde bien, los mandos no se sienten baratos ni con holguras ni latencias en su respuesta, los frenos aplican bien, las suspensiones copian todo bache que te puedas tragar y el motor se percibe desahogado. De nuevo, los retrovisores, el némesis de la moto, ya que dan buena visibilidad pero, podrían ser mejores.
Salimos de ciudad y la QJ SRV 125 empieza a transmitir otro punto en la experiencia de conducción, las marchas estiran con brío, la moto rueda con más inercia y tu disfrutas más. Es, como toda buena custom, super disfrutable a ritmos tranquilos pero rodados, es decir, no en el arranca-frena de la ciudad.
Las rectas van tornándose en curvas abiertas, y las curvas abiertas en tramos revirados. Cuando quise darme cuenta iba rascando los estribos y disfrutando como un niño pequeño. ¡Cómo estira el motor de la SRV 125! fuera de toda broma, parece el motor de una deportiva de 125 cc. Corre mucho, y mucho significa mucho, no bastante.
Las suspensiones siguen a la altura en un uso evidentemente fuera del marco para el que están pensadas, mientras que los frenos cuando empiezas a abusar de ellos pierden algo de tacto... podríamos decir que la pastilla de freno no está a la altura de los componentes internos de las suspensiones, las cuales siguen, como ya he dicho, ofreciendo un grandísimo trabajo fuera de su ámbito.
En este punto es donde la ergonomía custom neutra de la SRV 125 favorece ya que, al no tratarse de algo exagerado ni radical, la toma de curvas se disfruta como si de una naked relajada se tratara. El cambio de dirección es fácil y rápido, no torpe y lento como en las clásicas custom con geometrías "muy custom". La toma de curvas es redondeada, es decir, la moto inclina de manera homogénea, sin picos ni resistencias. Buena nota para los neumáticos aquí. Y el chasis aguanta perfectamente toda esta conducción claramente fuera de la pretensión de una custom.
Tal es así que, en todas y cada una de las curvas íbamos rascando la estribera, y no porque rozaran rápido o fácil, sino porque la SRV 125 iba rápido y fácil, que no es lo mismo. La verdad es que tengo que ser sincero y reconocer que la SRV 125 está recibiendo mis calificaciones más altas a pulso y por mérito propio. No me gustan nada sus retrovisores y el tacto de la frenada es mejorable, pero ya está, todo lo demás, una maravilla.
Ya de regreso, tuvimos un interesante tramo de autopista/vía de alta velocidad, donde pude alcanzar los 135 km/h de velocidad punta, llegando a los 130 km/h sin mucho esfuerzo. El motor tiene un carácter bastante deportivo, con una estirada buenísima, y alcanzando velocidades bastante altas no ya solo para tratarse de una custom, sino incluso de una moto de 125 cc.
Conclusiones y opinión QJ SRV 125 2023
La QJ SRV 125 como ya habéis visto en el bloque anterior de la prueba, es una custom con un gran rendimiento, en casi todos sus ámbitos. Tiene un motor espectacular, una gran ergonomía, un buen confort de marcha a la par que comportamiento dinámico, buen consumo que no lo hemos mencionado pero aprovecho para hacer el inciso, un estilo de lo mejor que encontraremos en el mercado, unos retrovisores horribles y un tacto de frenada mejorable.
Mi opinión sobre la QJ SRV 125 ya ha quedado patente, me parece la mejor si no de las mejores opciones de moto custom 125, resaltando el motor y el comportamiento dinámico.
Galería de fotos QJ SRV 125 2023
Fotos acción QJ SRV 125 2023:
Fotos detalles QJ SRV 125 2023:
Colores QJ SRV 125 2023
Vídeo-prueba QJ SRV 125 2023
https://youtu.be/SPjxw6yVXPk