Nos subimos a la BMW F 750 GS, una de las trail asfálticas de la temporada
BMW nos llevó hasta Cuenca para darnos a conocer a sus nuevas BMW F 750 GS y BMW F 850 GS, pero el diluvio universal cayó sobre la Serranía de Cuenca y apenas nos dio tregua para probar sus novedades en condiciones. Sea como sea, la breve toma de contacto que tuve con esta nueva Trail de media cilindrada fue más que suficiente para comprobar que la 750 supone un tremendo salto adelante para la saga.
Motorbike Magazine fue uno de los medios invitados a la presentación de la nueva gama trail de medio peso de la marca alemana. En este caso, vamos a centrarnos en la BMW F 750 GS, aunque, para ser honestos, poco pudimos hacer con la lluvia que nos sorprendió en la Serranía de Cuenca. Hasta allí nos llevó BMW, un idílico escenario para los amantes de las rutas en moto, pero que lamentablemente no pudimos aprovechar del todo.
Aun así, pudimos sacar algunas conclusiones y opiniones del trabajo realizado por los bávaros en la BMW F 750 GS que te contamos a continuación.
Equipamiento
- Casco: SCORPION ADX-1
- Chaqueta: BERING Michigan
- Pantalón: BERING Michigan
- Botas: TCX Baja Gore-Tex
- Guantes: BMW Rallye
¿Cómo es la BMW F 750 GS 2018?
Si en la nueva BMW F 850 GS han querido acentuar la parte más aventurera, en la BMW F 750 GS han apostado por la vertiente más urbanita, más polivalente y más accesible. Y ha sido todo un acierto, un gran acierto.
Comparte motor, chasis y soluciones electrónicas con la F 850 GS, siendo las suspensiones y su diseño las principales diferencias entre ambos modelos.
La horquilla es de tipo convencional mientras que el amortiguador no es progresivo, siendo ambos de menor recorrido que en la F 850 GS y, por lo tanto, ofreciendo una altura de asiento de 815 mm de serie que pueden llegar a reducirse hasta los 770 mm, lo que viene a ser unos 90 mm más que las motos más bajas del mercado –que suelen ser las de tipo custom–.
La posición de conducción es algo más relajada, pues su manillar está levemente girado hacia atrás. A pesar de su nombre, el motor es exactamente igual al de su hermana gemela. Éste recibe cambios en la gestión electrónica con los que ofrece una potencia algo menor y una curva de par más suave. Pero que estos datos no te lleven a engaño, pues hasta las 5.000 rpm el comportamiento de ambos modelos es prácticamente igual y sólo se podrá echar en falta algo de potencia si se conduce de forma deportiva, algo para lo que no tiene inconveniente este modelo pero que, obviamente, no es para lo que está pensado.
Durante la presentación de ambos modelos, BMW nos informó sobre la cuota de mercado que han logrado con sus GS de media cilindrada, pues han acaparado el 30% de las ventas de este segmento con 1.603 unidades vendidas en 2017 –F 700 GS + F 800 GS + F 800 GS Adventure–, pero la auténtica “joya de la corona” es la F 700 GS, que logró la mitad de esas ventas por sí sola.
Y si la F 700 GS ha sido el verdadero motor de ventas de este segmento hasta el año pasado, la nueva F 750 GS 2018 viene cargada de argumentos para multiplicar esas cifras.
Para gustos, los colores. Pero ninguno de los que asistimos a esta presentación disentimos a la hora de decir que la nueva F 750 GS es mucho más bonita que la anterior y que, además, tiene un aspecto de “más moto” que antes.
Por diseño es imponente, pero cuando te subes a ella la percepción cambia por completo. Eso sí, no deja de ser una moto sencilla en cuanto a acabados, pues la cúpula baja o la horquilla convencional indican que estás ante una moto de acceso, pero éstos son detalles que no le restan empaque a esta nueva alemana.
Probando la BMW F 750 GS
Touché! La BMW F 750 GS me enamoró. Y mira que no es el tipo de moto que a mí me seduce, pero en BMW han logrado hacer una moto que te cautiva desde el primer momento. Es divertida, pero también es fácil de conducir, lo que la hace doblemente divertida; pasarán muy pocos kilómetros hasta que se te dibuje una sonrisa en la cara que no se te borrará hasta que te bajes de ella.
Sin duda alguna, los cambios que han hecho en la nueva F 750 GS 2018 le han sentado de maravilla y sin atreverme a decirlo demasiado alto, creo que la principal protagonista de esta remodelación debía ser la 750 y no la F 850 GS, que ha acaparado todas las miradas por su estética más agresiva y las fotos Off-Road que nos presentan una moto muy aventurera.
Como decíamos, el propulsor de la BMW F 750 GS ha sido “descafeinado” para ofrecer unas prestaciones más acordes a quien busca una moto fácil de conducir. Y lo cierto es que han conseguido que el motor sea muy dócil y agradable, pero sin que se le echen en falta prestaciones; la curva de potencia ya nos indicaba que no había grandes diferencias respecto a su hermana hasta superar las 5.000-6.000 rpm, que a fin de cuentas es un rango más que suficiente como para rodar a ritmo alegre.
Este propulsor, que ahora cuenta con un cigüeñal calado a 90º, ofrece un sonido similar al de una moto de dos cilindros en V, siendo este detalle, otra mejora muy interesante respecto al modelo anterior, pues al poner el propulsor en marcha, la moto resulta más imponente que cuando está parada.
Respecto a las sensaciones en marcha, la BMW F 750 GS se siente como una moto principalmente fácil de llevar. Todo en ella te hace sentir cómodo y confiado, lo que se traduce en sensaciones muy reconfortantes desde el primer momento. Sinceramente, me sorprendió muy gratamente el buen funcionamiento de esta moto y estoy seguro que [email protected] que decidan apostar por esta alemana como su primera moto grande, serán gratamente [email protected] con una moto tan noble y divertida que no querrán separarse de ella jamás.
Las suspensiones, que son más sencillas que las de su hermana, son parte importante a la hora de ofrecer este buen comportamiento, y es que aunque son bastante blandas también sorprenden por ser suficientemente firmes en curvas rápidas, proporcionando un excelente compromiso entre comodidad, agilidad, y estabilidad. Un nuevo –y muy importante– punto a favor de la nueva F 750 GS.
Por supuesto, como buena BMW que es, esta F 750 GS viene dotada de una buena carga de soluciones electrónicas y, fiel a la política de la marca, cuenta con un amplísimo repertorio de extras que se pueden incorporar de forma opcional.
De serie cuenta con dos modos de conducción –Rain y Road– con diferente respuesta al acelerador –Suave u Óptimo– y diferentes niveles de intervención tanto en el ABS como en el Control de tracción.
En el caso de los modos de conducción opcionales –Dynamic y Enduro–, éstos ofrecen el ABS Pro, que modula su intervención en función de la inclinación de la moto, el DTC, que es el control de tracción inteligente de BMW, así como la suspensión electrónica ESA, que en este modelo sigue interviniendo únicamente en el amortiguador.
Además de toda esta electrónica, adopta la nueva pantalla a color de 6,5” que han recibido alguno de los modelos más importantes de la marca. La cara B de esta novedad es que se trata de un extra opcional, pero eso no quita el mérito que tiene que BMW ponga en el mercado un modelo Trail de acceso con una dotación electrónica digna de motos de categorías superiores y, lo más importante, a un precio realmente atractivo (más aún con las opciones de financiación que ofrece BMW).
En lo que respecta a la protección aerodinámica, la pequeña pantalla hace un trabajo digno y desvía buena cantidad de aire, mientras que la anchura del depósito protege bien las piernas.
Esta nueva versión ha dado un gran salto adelante y todo apunta a que BMW logrará dar continuidad al excelente número de ventas que ya ha conseguido anteriormente con este modelo; desde luego, ha reforzado lo positivo de la F 700 GS y ha dotado a esta nueva F 750 GS con más y mejores argumentos.
Posicionamiento, precio y rivales de la BMW F 750 GS
Lógicamente, las mejores implementadas en todos los ámbitos y la tendencia previsible del mercado han hecho que el precio de la BMW F 750 GS haya subido ligeramanente respecto a la F 700 GS. Además, la llegada de la BMW G 310 GS hace que sea ahora ésta la nueva puerta de entrada al mundo trail de la marca alemana, por lo que la 'siete y medio' puede elevar ligeramente su nivel. La F 750 GS comparte la mayoría de características con la también nueva BMW F 850 GS, pero la 750 está orientada a un uso más urbano y relajado, aunque manteniendo sus aspiraciones viajeras.
Segmento trail de BMW
Con todas estas mejoras, la BMW F 750 GS llega mucho mejor preparada para enfrentarse a sus rivales en el segmento trail A2 más asfáltico. Entre ellas, tenemos que citar sin falta a la Triumph Tiger 800 XR, XRx y XRt. Con sus diferentes niveles de equipamiento, la británica es su rival más directa. No podemos obviar otras opciones interesantes, pero un poco más modestas en todos los sentidos, como la Yamaha Tracer 700, la Suzuki V-Strom 650 y la Kawasaki Versys 650.
Galería de fotos BMW F 750 GS