«No creo en la mala suerte», dice el de KTM tras su segundo abandono consecutivo optando a la victoria
Pol Espargaró, que lideraba la carrera antes de la bandera roja, no disponía ya de ningún neumático trasero medio nuevo para la reanudación. Tuvo que salir con un compuesto blando, con el que sus sensaciones eran bastante diferentes. «Ha sido mi error, error del equipo, error de todos, porque no esperábamos la bandera roja», comentó.
Por segunda semana consecutiva, la suerte le fue esquiva a Pol Espargaró a la hora de la verdad. De nuevo, el piloto de KTM completó unos muy buenos entrenamientos en el GP de Austria, dominó dos sesiones de libres y se mostró como el piloto con mejor ritmo. En carrera estaba plasmando esa misma sensación y, tras arrancar quinto, lideraba en el momento de la bandera roja por el bestial accidente de Zarco y Morbidelli.
Espargaró había hecho dos vueltas rápidas seguidas, tenía casi medio segundo de ventaja con Dovizioso y entonces llegó la bandera roja. El problema para él fue que el parón de la carrera tuvo un daño colateral: no le quedaba ya ningún neumático trasero medio nuevo, tuvo que salir con el blando y las sensaciones cambiaron radicalmente. De hecho, el compuesto blando sólo lo había usado para la Q2. «Ha sido mi error, error del equipo, error de todos, porque no esperábamos que llegase una bandera roja en esta carrera y ha aparecido», mencionó Pol, que añadió que con el blando «la historia cambió por completo, me costaba mucho más y no era capaz de frenar como quería». Pese a salir primero, fue perdiendo posiciones a marchas forzadas y acabó por los suelos cuando era quinto tras un toque con Oliveira.
Aun así, lo que había demostrado en las ocho primeras vueltas antes de que se parase la carrera, le deja con buen sabor de boca. La buena noticia, es que volverá a tener otra carrera en Red Bull Ring para quitarse la espina: «Tengo ganas, porque creo que teníamos la mejor moto de la parrilla en la primera carrera. Con los neumáticos que tocaba, éramos los más rápidos y de hecho me estaba escapando un poco de Dovizioso. Tengo muchas ganas de volver a correr aquí; si no, sí que me daría mucha rabia, porque al igual que en Brno teníamos la mejor moto. Ha pasado lo que ha pasado, me he quedado sin neumático para la segunda carrera y me he ido para atrás, pero tengo muchas ganas de correr aquí porque éramos candidatos a la victoria».
Pese a que la suerte no le ha acompañado en las dos últimas carreras, en las que podría haber luchado por sus primeras victorias con KTM, no le quiere dar más vueltas ni hablar de mal fario: «No me apetece pensar en mala suerte ni en cosas de esas, porque realmente no lleva a ningún sitio. Hay que ser proactivo, hay que pasar página y hay que evolucionar. Parece que ha sido mucho, pero han sido dos carreras y en la segunda lideraba hasta la bandera roja. Ha pasado lo que ha pasado, pero realmente en la última carrera sí que las pasé un poco canutas porque era la primera vez que tenía la oportunidad de ganar una carrera y no pude por lo que pasó, pero en esta carrera he visto que también podía y creo que por eso estoy un poco más tranquilo, ya que he visto que no sólo fue en la República Checa sino que el fin de semana que viene, si hacemos las cosas bien, tendremos oportunidad de ganar la carrera. No creo en la mala suerte, o creo poquito. La verdad es que no hemos tenido la mejor de las suertes, pero no hay que pensar en eso. No me gusta pensarlo».
| Nombre | Pol Espargaró |
| Dorsal | 44 |
| País | España |
Pese a la espina que se le quedó en Brno, donde rodaba cuarto en el momento de su caída y donde Binder logró el primer triunfo de KTM en MotoGP, Espargaró cree que en Austria se le escapó una opción todavía más propicia para ganar: «Me sentía mejor incluso que en Brno. Aquí estaba disfrutando muchísimo pilotando durante el fin de semana, éramos muy rápidos y justo cuando se ha dado la bandera roja, cada vez yo iba un poco más rápido y veía que ellos cada vez un poco más lentos, y que les iba sacando un poco de tiempo. Han sido acciones distintas: en la República Checa no pude terminar por lo que visteis y aquí no he podido terminar por otra cosa distinta, pero me duele un poco más ésta, porque corremos en Austria y tenía muchas ganas de hacerlo bien. Creo que después de las primeras ocho vueltas, de cómo estábamos yendo y de haber luchado cuerpo a cuerpo con Dovi, de haberle ganado posición y de haberme escapado un poco, da rabia porque podríamos haber luchado por ganar la carrera. Pero ha sido como ha sido».
Respecto al choque con Oliveira que acabó con ambos pilotos de KTM por los suelos, Pol explicó después de la carrera que «he hablado con él hace unos minutos. Me había colado, porque me estaba colando en todas las curvas, y Miguel en ese punto también se fue un poco largo en esa vuelta. Hemos comprobado los datos y ha sido así. He abierto gas por fuera, él ha abierto gas por dentro, yo no he podido verle, él no ha podido verme... y hemos chocado. Ha sido exactamente lo que llamamos un incidente de carrera».
Sobre el accidente de Morbidelli y Zarco, del que se salvaron por los pelos Rossi y Viñales, Pol decía que fue «muy dura y difícil de ver. Valentino se ha escapado por centímetros. En ese punto se va muy rápido. Se me pone la piel de gallina y no quiero pensar qué hubiera pasado si esa moto hubiera impactado con Vale. Tenemos que estar todos contentos de que no haya pasado nada y hablaremos del incidente en la próxima Comisión de Seguridad».
