La crisis de semiconductores afecta también a MotoGP
Magneti Marelli ha desarrollado una nueva versión de la centralita electrónica para las MotoGP, pero la crisis de los semiconductores ha impedido que pudieran tener unidades suficientes para todos los equipos. Sólo disponen de ella las cinco estructuras oficiales.
Allá por 2016, Dorna y la FIM introdujeron en MotoGP dos cambios bastante relevantes con el objetivo de igualar prestaciones entre las diferentes marcas y equipos de la categoría: la llegada de Michelin como suministrador único de neumáticos para reemplazar a Bridgestone (proveedor único de 2009 a 2015) y la centralita única para todas las motos.
Desde entonces, la electrónica ha sido la misma para todos los equipos, contando con una ECU y un software igual desarrollado por Magneti Marelli. De cara a 2023, la compañía italiana ha actualizado su centralita, que cambia principalmente en que dicho dispositivo tiene una mayor memoria y una mayor velocidad para procesar toda la información.
Sin embargo, Magneti Marelli se ha encontrado con un problema a la hora de desarrollar esta nueva ECU. Según adelantó Motorsport.com, la marca italiana no ha podido fabricar suficientes unidades de la nueva versión de la centralita para suministrárselas a todos los equipos de la parrilla.
La crisis y escasez de chips semiconductores ha impedido que se hayan podido desarrollar las unidades suficientes de las centralitas para todos. Un problema de suministro que afecta a todos los sectores tecnológicos desde hace tiempo y que también hace mella desde hace más de dos años a la industria de la moto.
Nueva ECU sólo para equipos oficiales, pero sin aparente ventaja de rendimiento
Ante la falta de recursos suficientes para suministrar a las 11 estructuras de MotoGP, por el momento Magneti Marelli tan sólo ha repartido la nueva versión de la ECU a los cinco equipos oficiales (Repsol Honda, Ducati Lenovo, Monster Energy Yamaha, Red Bull KTM y Aprilia Racing), que ya pudieron utilizarla en los test de Sepang. Por su parte, las estructuras satélites (GasGas, Gresini Racing, LCR Honda, Mooney VR46, Pramac Ducati y RNF Aprilia) aún tendrán que esperar para disponer de esta nueva versión que ha sido bautizada como 'BAZ'.
Dicho lo cual, tampoco se esperan diferencias aparentes entre el hecho de llevar la nueva ECU o la antigua, puesto que el software de ambas sí que será exactamente igual. Dicho software ha de ser el mismo para todos los fabricantes y sólo podrá recibir alguna modificación si todas las marcas lo aceptan de forma unánime.
Así las cosas, los equipos satélites empezarán la temporada por detrás de las estructuras oficiales en este sentido, aunque no se espera que esto suponga ninguna ventaja (o una ventaja apreciable) en términos de rendimiento para quienes dispongan de la nueva ECU. Se trata tan sólo de un hardware actualizado, pero el verdadero "cerebro", el software, será igual para todos.