El piloto español cede el liderato de MotoGP tras caerse en Assen
Maverick Viñales se va de Assen con las manos vacías. El fin de semana empezó a la perfección para él, que dominó con claridad el viernes en seco, pero todo se torció bajo la lluvia en los entrenamientos cronometrados, donde no pudo pasar de la 11ª posición. En la carrera de hoy, cuando ya había escalado seis plazas, se ha ido al suelo a 15 vueltas del final.
Después de perder el liderato de MotoGP, Viñales no encontraba explicación a la caída que ha sufrido en Assen, con la que ha sumado su segundo cero de 2017: «La caída ha sido inexplicable. No lo sé, realmente ha sido rara. Quiero dar las gracias a Doviozoso, porque podría haber sido una caída muy fea pero ha tenido la habilidad de esquivarme, así que darle la enhorabuena. Contento por eso, pero en general decepcionado. Viendo el ritmo que tenía y cómo estaba viniendo, además iba a preparar mis diez últimas vueltas como siempre, para atacar. Creo que hoy era el día para hacer la victoria; viendo los tiempos que estaban haciendo los pilotos, creo que hubiera podido dar mi máximo», ha comentado en Movistar MotoGP.
Posteriormente, Viñales ha ahondado en esa caída e incluso ha apuntado al nuevo chasis como una de las posibles causas: «He intentado preparar bien la aceleración y me ha hecho un movimiento extraño la moto que no me había hecho durante todo el fin de semana, y justo ha sucedido ahí. Habrá que mirar si ha sido este chasis que realmente no permite que sea tan agresivo».
Nombre | Maverick Viñales |
Dorsal | 25 |
País | España |
Moto | Yamaha YZR-M1 2017 |
Las primeras vueltas han sido complicadas para el piloto de Yamaha, que ha necesitado de más de diez vueltas para empezar a encabezar el grupo trasero. Cuando ha pasado al frente de ese grupo, estaba a a tres segundos del cuarteto de cabeza. Así ha explicado Viñales sus primeras vueltas y las buenas sensaciones que tenía: «Al principio tenía muchos problemas delante y no podía apretar al máximo. Me lo quería tomar con calma, porque sabía que mi fuerte iban a ser las últimas 15 vueltas y cuando ha pasado la quinta o sexta he empezado a hacer 1:34 medios, que era lo que tenía pensado hacer para el resto de carrera. La moto funcionaba perfectamente y yendo detrás de Iannone, Dovizioso o Pedrosa he visto que nuestra moto tenía un gran potencial hoy».
El gerundense extrae el lado positivo, y es que sólo está a cuatro puntos de Dovizioso y se encuentra en la segunda plaza del campeonato: «Lo positivo es que no ha habido lesión y seguimos a cuatro puntos del líder. Hay que mirar ese lado positivo y empezar el campeonato de cero. Me lo he jugado a todo o nada y ha salido nada, pero es consecuencia de ayer».
Por último, no destaca a ninguno de sus rivales por encima del resto. Ve a Rossi, Márquez y Dovizioso a un nivel parejo: «Todos ellos están fuertes y han estado delante luchando hasta que han empezado a caer las gotas. Tendremos que ser los pilotos que nos encontremos más fuertes en la segunda mitad de temporada».