La toledana debutará en el Mundial de Supersport 300 en 2018
María Herrera analiza su llegada al Mundial de Supersport 300, certamen en el que desembarca de la mano del MS Racing después de competir de 2015 a 2017 en el Campeonato del Mundo de Moto3.
Después de tres temporadas compitiendo en el Mundial de Moto3, María Herrera abre una nueva etapa en su trayectoria. La piloto toledana de 21 años estará el año que viene en el Campeonato del Mundo de Supersport 300, certamen que nació en 2017 y cuyo primer campeón fue el catalán Marc García, enrolado en las filas del Halcourier MS Racing.
Precisamente será con esta estructura con la que María debute en esta competición, haciéndolo a los mandos de una Yamaha YZF-R3. La de Oropesa pasará a competir con motos de serie en una categoría pensada para jóvenes promesas, que ha tenido mucho éxito en su primer año y que para la próxima temporada cuenta con nada menos que 36 inscritos. «Cuando finalizó el año, los responsables del equipo MS Racing me hablaron de esta categoría, me enseñaron un poco cómo era y me pareció buena idea. Creo que es una categoría divertida, la temporada pasada había mucha igualdad y espero que este año también sea así. Había seguido algo el Campeonato, porque había gente como Marc García o Dani Valle a los que conozco de cerca y me interesaba ver cómo iban», comenta Herrera en 'WorldSBK.com', web oficial del Mundial de Superbike.
María llega a la estructura campeona de 2017 tanto de pilotos como de equipos, un lugar propicio para desembarcar dentro de este certamen: «Creo que es una escudería que ya tiene información y parece que la moto está bien puesta a punto. Además, tengo un compañero de equipo que conoce la moto, las pistas y es buen compañero, así que pienso que podemos hacer buen equipo y luchar por estar delante».
Ese compañero de equipo que menciona es el madrileño Dani Valle, que recientemente renovó para la temporada 2018 con el conjunto que dirige Félix Garrido. Herrera conoce bien a Valle y destaca el buen clima que se vive en el MS Racing: «Ya conozco a Dani, hemos entrenado juntos y es un chico muy majo, nos llevamos bien. Por las reuniones que he tenido, primero en Albacete y después en Madrid, creo que en el equipo hay un buen ambiente y que podemos hacer una buena piña».
En el Mundial de Supersport 300 volverá a coincidir con la otra fémina de referencia del motociclismo español cuando hablamos de velocidad, Ana Carrasco, quien puso el listón muy alto tras conseguir en Portimao la primera victoria de una mujer en un Mundial. No obstante, el caso de la murciana no es el que se marca María como referencia: «La referencia que me pongo son los tiempos que se hicieron el año pasado. Si superara esos tiempos estaría bien, sería un gran resultado. Con Ana seremos rivales en la pista, como con cada piloto, claro, y fuera de la pista hay una amistad pero… como competíamos en diferentes Campeonatos hace mucho que no la veo».
Después de acumular una experiencia bastante valiosa en sus tres años en el Mundial de Moto3, la toledana aparece en los pronósticos como una candidata al título en una categoría cuya tónica es la gran igualdad que existe en cada carrera. María también ve el título como objetivo y como punto de inflexión para decidir su futuro: «Está claro que un título lo queremos todos, entonces yo lucharé este año a muerte por ganar y depende de cómo vaya el año decidiremos al final si quedarnos o buscamos una alternativa».