Márquez valora el legado que dejará Rossi en el motociclismo
Tras un viernes pasado por agua en el que ha terminado 14º, Marc Márquez hacía balance de la jornada y también opinaba sobre dos de los temas principales del fin de semana: la nueva edad mínima que impondrán Dorna y la FIM, y el legado que dejará Valentino Rossi, que afronta su última carrera en Italia.
Marc Márquez cierra el viernes del GP de Emilia-Romagna con algunas dudas a tenor de su 14ª puesto por la tarde, aunque por la mañana había acabado segundo. Ambas sesiones de han disputado en condiciones de lluvia, algo que no se espera para el domingo, pero quizá sí que se mantenga para los entrenamientos de mañana: «La valoración del día es que puede ser anecdótico y no, porque mañana las previsiones pintan mejor que hoy, pero puede ser también en agua. Veremos en el FP3, que será como una qualy para pasar directamente a la Q2. Será importante, porque si es en agua se quedarán muchos pilotos rápidos en la Q1 y será muy difícil pasar. Veremos cómo va. Está claro que esta tarde no hemos sacado el máximo partido de la situación y no nos han salido las cosas como esperábamos, pero estamos a viernes y hay que seguir trabajando», explicaba.
La noticia del día ha sido el anuncio conjunto de la FIM y Dorna sobre los cambios reglamentarios que se ejecutarán entre 2022 y 2023, con un aumento de la edad mínima en todos los campeonatos y una disminución de las parrillas en varios de ellos. Respecto a la edad mínima, para llegar al Mundial de Moto3 ésta pasará de los 16 años actuales a los 18. Esto opina Márquez al respecto: «Creo que es bueno. Creo que era el momento de hacer algún cambio por las noticias y sucesos que han ido pasando este año. Se ha anunciado para 2023 (edad mínima de 18 años en el Mundial), porque se tiene que cambiar un poco los escalones y empezar ya más tarde, porque tampoco puedes tener a un chaval cuatro años en la misma categoría de promoción. Se tiene que ir cambiando y hay trabajo por hacer. El primer paso es bueno. Sí que soy de los pilotos que subió más joven, pero cada piloto tiene su caso particular y mover la edad es bueno para el motociclismo. Será bueno para la seguridad, porque no se hacen los mismos errores con 15 años, que con 18 ó 22, y eso irá mejor. Contento con el cambio».
En el que será el último Gran Premio de Valentino Rossi en Italia, a Márquez le han preguntado sobre el legado que dejará el #46, sobre todo a nivel de la afición que ha movido siempre con su 'marea amarilla': «Está claro que Valentino, su carrera deportiva y lo que ha hecho por el motociclismo, ha sido único y será único. Creo que nadie está al alcance de repetir algo similar. Ha sido el primero que ha ganado mucho, como otros tantos pilotos y ha hecho mucho por el motociclismo, pero ha arrastrado a mucha gente al motociclismo, y esto creo que es una cosa única que MotoGP le tiene que estar agradecido», comentaba Márquez.
«Estoy convencido de que el año que viene él no competirá, pero los circuitos seguirán siendo en gran parte amarillos, y cuando digo gran parte me refiero a más de la mitad. ¿Por qué? Pues porque han sido muchos años corriendo, una carrera deportiva muy larga y exitosa, y única también en este sentido, mediáticamente. Ya sabéis que mi relación con él no es buena, pero no tengo ningún problema en reconocerlo y en ver la realidad. Esto es una cosa admirable», añadía.
Precisamente le preguntaron también por esa relación con el #46 y si cree que puede cambiar a partir del próximo año: «El año que viene no competirá. Sí que estos años competía pero tampoco éramos rivales directos. Pero no depende de mí si la relación cambia o no, tampoco me importa mucho», zanjaba Márquez.