La importancia de mantener la equipación de cuero en buen estado
Uno de los elementos que más sufre cuando vamos en moto es nuestra chaqueta o mono de cuero, ya que están expuesto completamente a las inclemencias, por lo que mantenerlo en perfectas condiciones es fundamental si quieres que dure lo máximo posible.
Estoy seguro de que más de una vez te has preguntado cómo limpiar tu mono o chaqueta de cuero, y habrás leído ciento y una “ideas” a cuál más curiosa. Pero lo cierto es que, si quieres conservar durante mucho tiempo tu equipamiento de piel, deberás seguir unos pasos cada vez que vuelves a casa tras salir a rodar con tu moto.
Lo primero es eliminar los restos de insectos, y para ello usaremos simplemente un paño y agua, sin añadir jabón, ya que de este modo evitaremos que la piel sufra y se pueda dañar. Una vez eliminados los restos más visibles, seguiremos frotando el resto de la superficie, sin olvidar ninguna parte de la chaqueta o el mono, sobre todo en los pliegues de rodillas y codos. Una vez limpio, dejaremos secar sobre una percha, en un lugar ventilado y sin que le llegue directamente la luz del sol. También puedes acelerar el proceso usando un ventilador.
Una vez seco, debemos hidratar la piel, y para ello usaremos una crema neutra o productos específicos para ello, desde los específicos para este tipo prendas hasta toallitas para limpiar cuero que están a la venta en grandes superficies con lo que evitaremos que la piel se reseque y se agriete. Para ello, usaremos muy poca cantidad con un trapo limpio para extenderlo muy bien. Es importante no aplicar mucha cantidad, ya que nuestra chaqueta o mono no podrá absorberlo por lo que habrá producto sobrante que tendremos que eliminar.
Si el forro interior es desmontable, lo podrás lavar en la lavadora, siendo recomendable el programa de prendas delicadas. Si no es desmontable, puedes sumergir el mono o la chaqueta completamente en agua templada, con jabón neutro y realizar varios aclarados hasta conseguir que se quede limpio. En este caso, es muy importante que seques perfectamente tanto el interior como el exterior para evitar que el cuero se deteriore por la humedad.
Para los guantes, podemos seguir un proceso similar al del mono de cuero, es decir, usar un trapo y agua para quitar todos los restos de suciedad y después hidratarlos bien. Para el interior tenemos dos opciones. La primera es sumergirlos completamente en agua y jabón, aclaramos muy bien, dejamos secar y luego hidratamos. La segunda opción es usar talco en su interior. El talco hace que absorba toda la humedad, y lo que es más importante, el olor. Eso sí, deberás dejar que actúe al menos un par de días y luego deberás sacudir bien todo el interior y eliminar todos los restos de talco.
En el caso de las botas, que alternan partes de microfibra y de plástico, también se puede usar un paño y agua para quitar los restos de suciedad en la parte de microfibra, y para los plásticos, usar algún limpiador específico para este material. En el caso del interior podemos usar cualquier solución con ácido bórico, que eliminará de manera muy eficaz la humedad y el olor.
Fotos: BHIR - RST