«Es un momento ideal para hacer un cambio», comenta Laia
Laia Sanz aparca la moto en el Dakar tras 11 exitosas participaciones a sus espaldas. Aunque no ha especificado cuáles serán sus planes, la de Corbera de Llobregat se encamina hacia su paso a las cuatro ruedas en el rally más duro del mundo.
Después de 11 ediciones, de 11 llegadas a la meta y de 11 victorias en la categoría de féminas, con un noveno puesto como mejor resultado en la general global, Laia Sanz cambia de aires en el Rally Dakar. La piloto catalana, una auténtica leyenda de las dos ruedas por sus actuaciones dakarianas, los 14 Mundiales de Trial y los 5 de Enduro (va rumbo al sexto), no disputará la próxima edición del Dakar en la categoría de motos.
«Ha sido una decisión difícil, pero creo que era el momento ideal para hacer un cambio. Te das más cuenta del riesgo y, además, los dos últimos años no han sido nada fáciles», comenzaba diciendo Laia, que durante 2020 pasó un auténtico calvario por la enfermedad de Lyme.
«Probablemente no haya llegado al Dakar tan preparada como me hubiese gustado y no lo he disfrutado tanto. Al final no tengo 20 años y es un momento ideal para empezar a hacer un cambio», añade Laia, que tiene claro que es el momento de aparcar las motos en el rally para dar el paso a las cuatro ruedas. «Seguro que lo echaré de menos, pero viene una época de aprender y vivir cosas nuevas que me motiva mucho», apostilla.
Lo que aún no tiene definido la campeona española es en qué categoría de cuatro ruedas tomará parte en la próxima edición del Dakar, si en coche o SxS ('side by side'), una decisión que se conocerá más adelante.
No en vano, el 2021 ha sido un año realmente productivo para Laia, que regresó a los Mundiales de Trial y Enduro tras un largo parón, y su vuelta a ambas disciplinas no ha podido ser mejor. En Trial recuperó la corona tras ocho años de ausencia, destronando a las primeras de cambio a Emma Bristow, la gran dominadora del trial femenino desde que Laia lo aparcó. Sanz logró su 14º título de Trial y lidera el Mundial de Enduro a falta de sólo una cita.
«El título de Campeona del Mundo de Trial era un objetivo muy difícil y bonito al mismo tiempo, y estoy súper orgullosa de haberlo conseguido. Ha sido un año en el que he sufrido mucho y creo que todavía le doy más valor. Aún queda el Mundial de Enduro que está en juego, así que espero que vaya muy bien la última carrera y poder cerrar una temporada brutal», explica Laia.
Además de esto, Sanz ya se estrenó en las cuatro ruedas compitiendo en la categoría de Extreme E junto a Carlos Sainz y este fin de semana debuta en Rallycross en Benelux. «Todas las cosas que hago me pueden ayudar. El ‘coco’ que he tenido siempre para la moto me puede servir mucho para aprender en coche. Lo que he pasado con el tema del Lyme fue muy duro, seguramente de los peores momentos de mi vida. Cuando llegas así a una carrera es una situación desagradable y lo he compensado mucho con la parte mental. He sabido aprovechar muy bien las fuerzas que tenía y creo que he aguantado muy bien la presión, los nervios y esta situación, que no es fácil», zanja la de Corbera de Llobregat.