Rodó con una Yamaha R1 en Mugello y con una Panigale V4 en Misano
El pentacampeón mallorquín volvió a ponerse a los mandos de una moto en sendos eventos, uno en Mugello y otro en Misano. En el primero, al que acudió como embajador de Vmoto, rodó con una Yamaha R1, mientras que días después se pu
Ver pilotar una moto a Jorge Lorenzo se había convertido en algo muy poco habitual en los últimos tiempos, pero como suele decirse: quien tuvo, retuvo.
El cinco veces Campeón del Mundo (dos en 250cc y tres en MotoGP) ha arrancado dos nuevos retos profesionales este año, entrando en el equipo de comentaristas de DAZN en el Mundial de MotoGP para algunas carreras y también disputando la Porsche Cup Italia, donde está disfrutando de un positivo debut en competiciones automovilísticas.
Sin embargo, echábamos de menos ver al #99 lucir de nuevo el mono a los mandos de una moto en circuito, algo que hizo recientemente en Mugello, uno de los trazados fetiche del expiloto mallorquín.
Lorenzo tomó parte en el Vmoto Soco Proday 2022 como embajador de esta firme, y estuvo acompañado en pista por pilotos de la talla de Troy Bayliss y de Michele Pirro, probador de Ducati. Todos ellos hicieron de monitores de lujo con algunos de los clientes de Vmoto, que tuvieron la oportunidad de rodar con ellos en el icónico trazado de Mugello.
Para este evento, Lorenzo se puso a los mandos de una Yamaha R1 pintada de blanco, rojo y negro, los colores identificativos de la marca de motos eléctricas a la que representaba en el evento.
Pero una vez le picó el gusanillo al balear, no quiso parar y días después puso rumbo a Misano para rodar con Michele Pirro. El italiano, con el que mantiene una gran relación desde la época en la que coincidieron en Ducati, le cedió una Panigale V4 para que el pentacampeón disfrutase de otra jornada de motos en el trazado italiano. A tenor de los comentarios en redes sociales, no parece que Lorenzo se lo pasara mal... ni mucho menos.
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