Jorge Lorenzo, consciente de las dificultades de Ducati en Jerez

En el día de su 30º cumpleaños, Jorge Lorenzo ha analizado cómo llegan a Jerez después de un complicado inicio de su andadura con Ducati. El balear, que siempre ha realizado buenos resultados en la pista andaluza, no se muestra demasiado optimista de cara a la cuarta cita de la temporada en un trazado que habitualmente se le ha atragantado a Ducati.



Jorge Lorenzo llega al cuarto Gran Premio del año con sentimientos encontrados. Por un lado, desembarca en uno de los circuitos que mejor se le ha dado en MotoGP; por otro, a uno en los que Ducati siempre ha tenido dificultades: «Aquí siempre he ido rápido, sobre todo en MotoGP. Es un circuito con muchas curvas rápidas y ángulos que se hacen en primera, y por algún motivo siempre he sido rápido aquí. Hay pocas rectas y las que hay son muy cortas, así que para la Ducati no le beneficia mucho», ha comentado tras la rueda de prensa oficial.

El pentacampeón del mundo no cree que puedan pelear por un buen resultado este fin de semana: «En este momento y si no pasa nada extraño, la moto no está para estar arriba aquí en Jerez. Tenemos que trabajar mucho para compensar la pérdida de los alerones y generar más agarre en el tren trasero».

Aun así, Lorenzo asegura que la adaptación a la Desmosedici va por buen camino: «Quiero seguir con mi progresión, porque poco a poco me voy encontrando mejor con la moto, aunque es evidente que ahora mismo la moto no es la más adecuada para mi estilo de pilotaje», confiesa.

El #99 destaca que lo más importante ahora mismo es única y exclusivamente mejorar con la moto: «No me centraría en los resultados. Cuando la moto esté para ganar o subir al podio, pelearemos por ello. En Ducati saben perfectamente cuáles son los puntos débiles de la moto», unos problemas que se encuentran «principalmente el giro en las curvas». Además, confiesa que el trabajo de Ducati no se está centrando en mejorar a corto plazo: «Están trabajando de cara al futuro, para tener algo realmente importante los próximos meses».

A Jorge se le ha preguntado por el gesto de rabia tras caerse en Argentina, algo que según Lorenzo fue entendido a la perfección por Ducati: «Fue un gesto de mucha rabia con el que algunas personas oportunistas intentaron perjudicarme diciendo que estaba a culpando a la moto, cuando la culpa era totalmente mía», ha dicho. «Fue rabia por no poder demostrar la evolución de todo el fin de semana. No fue la imagen más elegante para la marca, pero en Ducati entendieron que el gesto no iba hacia la moto y no me recriminaron nada».

El de Ducati ha finalizado dejando claro que Jerez siempre es una prueba de fuego: «Es una gran prueba para comprobar si la moto puede ser competitiva en todos los circuitos».

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