Márquez, Mir y Rins ponen a prueba a Honda
Honda llega a Sepang rodeada de un mar de dudas tras un 2022 que fue nefasto para la marca del ala dorada. La recuperación física de Marc Márquez, y las notables incorporaciones de Joan Mir y Álex Rins serán los grandes alicientes en el apartado deportivo, pero todo pasa por dar con la tecla en el apartado técnico. Sepang será prácticamente el único cartucho antes del inicio de temporada, puesto que los test de Portimao se celebrarán sólo dos semanas antes del Gran Premio.
Después de un 2022 para olvidar, Honda se juega mucho este año. Sólo dos podios, uno de Pol Espargaró en Qatar y otro de Marc Márquez en Phillip Island, adornaron los paupérrimos números de la firma del ala dorada en MotoGP 2022. La marca más importante de la historia del campeonato se vio condenada al ostracismo y al último puesto de la clasificación de constructores, siendo claramente superada por Ducati, Aprilia, Suzuki, Yamaha y KTM. De hecho, Honda fue la única marca que no ganó carreras en todo el 2022.
Después de un 2020 y un 2021 difíciles para la marca, principalmente por los problemas físicos de Marc Márquez, la RC213V había recibido una notable renovación de cara a 2022. Un cambio que parecía que podría situar a los del ala dorada de nuevo en la pelea por el campeonato, tal y como confirmó la pretemporada y el podio de Pol Espargaró en la cita inaugural. Sin embargo, las buenas sensaciones y los buenos resultados frenaron en seco.
Marc Márquez, la pieza clave del proyecto, seguía arrastrando problemas en el brazo derecho que le obligaron a pasar por el quirófano tras el GP de Italia, y entre la baja del #93 y las anunciadas marchas de Pol Espargaró y Alex Márquez, Honda frenó en seco su desarrollo mientras el resto de marcas no paraban de mejorar, sobre todo Ducati y Aprilia. El descontento de Espargaró y el pequeño de los Márquez era evidente, mientras que Marc seguía en pleno proceso de recuperación y acudió a Austria para reunirse con la plana mayor de HRC en pos de buscar soluciones. Un toque de atención del #93 para empezar a sentar las bases de cara a 2023.
Por suerte, su cuarta operación y los consiguientes plazos de recuperación fueron incluso mejor de lo previsto, y Márquez pudo disputar las ultimas seis citas de la temporada. Su vuelta supuso algunos brotes verdes para la marca, con una pole en Japón bajo la lluvia, un podio en una carrera para recordar en Phillip Island, varias primeras filas y destellos de la calidad del ocho veces Campeón del Mundo, pero Honda seguía lejos a pesar de las evoluciones que fueron incorporando a final de temporada (algunas, como 'la cola de dragón' en el colín, copiadas de Ducati).
Por si esto fuera poco, los test de Valencia ahondaron aún más en las dudas. Y es que allí se pudo ver a un Marc Márquez decepcionado tras la jornada de pruebas después de que Honda no diese con la tecla. El #93 dispuso de tres motos diferentes con las que rodar allí, pero con ninguna vio avances por parte de la marca nipona. «Es como cuando esperas que lleguen los Reyes, pero no hay regalos», dijo entonces. «Honda tiene que dar dos pasos antes del test de Sepang», avisó. ¿Los habrán conseguido dar?
Márquez al frente y una triple llegada desde Suzuki
Un año más, Marc Márquez será el encargado de llevar la mochila sobre sus espaldas como punta de lanza del proyecto de Honda. A tenor de lo que se ha visto en estos últimos meses y de sus declaraciones, el ocho veces Campeón del Mundo ya ha dejado claro que se encuentra recuperado de la tormentosa lesión en el brazo derecho que arrastraba desde 2020, y es que la operación a la que se sometió en junio del pasado año ha resultado salvadora.
Como atestiguan sus últimas pruebas físicas en Austria, Márquez se encuentra en un estado físico formidable antes de empezar la pretemporada, por lo que ha cumplido con creces con su parcela. Por primera vez desde 2017 ha tenido un invierno tranquilo, sin tener que pasar por el quirófano y sin problemas físicos de última hora, algo muy reseñable sobre todo teniendo en cuenta el calvario que arrastraba con el brazo derecho desde 2020, acompañado además de otros dos episodios de diplopía. Sólo falta que Honda esté a la altura para poder luchar nuevamente por el título.
Pero el 2023 llega para HRC lleno de novedades relevantes. Tres de ellas se produjeron tras el inesperado adiós de Suzuki. Y es que los dos últimos pilotos de la marca de Hamamatsu, Joan Mir y Álex Rins, pasarán a formar parte del elenco de Honda este año. Pero no vienen solos, ya que Ken Kawauchi, quien fuera el jefe técnico de Suzuki en las ocho últimas temporadas, será ahora el nuevo responsable técnico de Honda en las carreras. Reemplazará a Takeo Yokoyama, quien ha sido reubicado por Honda en Japón para encabezar al grupo de ingenieros nipones de HRC.
Honda ha fichado a dos de los pilotos con más talento de la parrilla, como demuestra el título de Joan Mir en 2020 (tercer clasificado en 2021) y que Álex Rins ganó dos de las tres últimas carreras de la pasada temporada, despidiendo a Suzuki por todo lo alto. Mir se enfrentará al notable desafío de ser compañero de Marc Márquez, un 'asiento maldito' en las últimas temporadas con Jorge Lorenzo, Álex Márquez y Pol Espargaró. El mallorquín buscará quitarse el mal sabor de boca de un 2022 para olvidar dentro del box más laureado de toda la historia, el del Repsol Honda, al que llega en un momento de 'vacas flacas' para la marca.
Por su parte, Rins estará junto a Nakagami en el equipo LCR Honda y ocupará el asiento que dejó libre Álex Márquez para irse al Gresini Racing. Pese a formar parte del equipo satélite, Rins gozará de un trato calcado (o prácticamente) a Márquez y Mir. Está por ver su adaptación a la Honda, una moto que quizá sea de las más complicadas para su estilo de pilotaje, pero si algo ha demostrado el barcelonés en los últimos años es que talento y velocidad le sobran.
La llegada de Ken Kawauchi será otro estímulo más para HRC. Además de conocer de maravilla tanto a Rins como a Mir, el técnico japonés fue una pieza clave en los éxitos de Suzuki en su última etapa en MotoGP (2015 a 2022) y puede ser un soplo de aire fresco para el departamento de competición de la marca. El nipón es considerado como uno de los mayores expertos a la hora de desarrollar chasis, pero también se destaca de él su amplio conocimiento y su don para hacer de enlace entre el equipo de carreras y los ingenieros de la marca. Así fue en Suzuki, donde alcanzó la cima logrando el título en 2020 junto a Joan Mir. Su excelente relación y compenetración con los dos nuevos pilotos de la marca será un aspecto importante, aunque el desafío que tiene por delante es mayúsculo: aportar su granito de arena en que Honda, que viene de acabar última en el Mundial de constructores, pueda volver a la cima.
Honda RC213V 2023: examen crucial
«Necesitamos más motor y más estabilidad frenando», eran las consignas hacia las que apuntaba Marc Márquez tras los test de Valencia. La escalada aerodinámica que está viviendo MotoGP ha convertido a este factor en un tema de importancia capital, y ahí Ducati sigue llevando la batuta, mientras que Aprilia y KTM parecen haber cogido el testigo inspirándose en la F1 e incorporando a ingenieros procedentes del 'Grand Circus' de las cuatro ruedas.
Sin embargo, tanto Honda como Yamaha siguen un paso por detrás en este aspecto, y por ahora las principales innovaciones que se han visto en Honda en el apartado aerodinámico han sido más una copia de Ducati que algo cocinado entre bambalinas en Japón.
Para alivio de sus pilotos, al menos en Honda no han parado quietos y han tratado de buscar soluciones. A finales de 2022 trabajaron junto a Kalex para desarrollar un nuevo basculante de aluminio, han cambiado de suministrador de escapes (Akrapovic) para utilizar la misma marca que el resto de la parrilla, y están buscando soluciones a nivel de chasis para que la Honda sea una moto menos crítica, ya que sus pilotos siguen copando varias de las primeras posiciones del ranking de caídas temporada tras temporada.
Bradl probó en el Shakedown una RC213V algo más corta entre ejes, más similar a ese prototipo que Márquez conducía casi a su antojo antes del notable cambio de 2022. La llegada de Kawauchi también puede ser importante en el desarrollo de la parte ciclo, debido a su experiencia con la Suzuki, aunque el carácter del motor y la aerodinámica serán dos de los focos en los que Honda tendrá que mejorar si quieren volver a entrar en la pelea en los puestos delanteros.
«Te puedes arriesgar si sabes la dirección. En este momento no sé exactamente, creo que tienen más o menos clara, pero no te puedes arriesgar a pegar un tiro al aire, porque sabes que hay sólo un tiro, porque con la moto con la que llegas a Malasia es con la que compites todo el año. Ellos tienen que decidir; me da igual como si la rueda de atrás está delante y la de delante está atrás, yo quiero una moto que vaya mejor o que esté al nivel para ganar», decía Marc Márquez tras los test de Valencia. Ahora toca saber si, como él, Honda también ha hecho los deberes en invierno. En Sepang tendrán una prueba de fuego, ya que se juegan todo prácticamente a un cartucho en esos tres días; después sólo quedará el test de Portimao (10 al 12 de marzo) dos semanas antes del inicio del Mundial, por lo que deberían salir de Malasia prácticamente con la moto con la que competirán en 2023.