«La oportunidad de volver a Moto3 ya se nos había presentado, pero nunca un proyecto que merezca la pena»
Ana Carrasco habla con MOTORBIKE MAGAZINE tras presentar el Estudio #EllasConducen Sin Barreras de Midas, del que ella es embajadora. La murciana nos cuenta los prejuicios que ha tenido que enfrentar como mujer en su carrera deportiva y sus objetivos tras volver después de siete años al Mundial de Moto3.
Midas, la cadena especialista en el mantenimiento integral del automóvil, ha presentado el Estudio #EllasConducen Sin Barreras, que se encuentra dentro de su iniciativa #EllasConducen. El objetivo de este proyecto es romper con los mitos de la mujer al volante a la vez que ayudar a quellas mujeres que se encuentran en riesgo de exlcusión social a financiar su carnet de conducir. Para exponerlo, Midas ha contado con la presencia de la embajadora de la iniciativa #EllasConducen, Ana Carrasco.
La piloto de Moto3 es un ejemplo de que las mujeres son capaces de alcanzar las mismas metas que los hombres, incluso contando con menos recursos. Ella misma explicó durante la presentación del Estudio las dificultades y los obstáculos que ha tenido que superar dentro de su carrera deportiva debido a su género. A pesar de todo, nada ha impedido que Ana haga historia con sus 7 victorias y 12 podios en la categoría de Supersport 300 del Mundial de SBK, y que se convirtiera en la primera mujer en ganar un Campeonato del Mundo de velocidad en 2018 tras hacerse con el título.
Ahora, de vuelta en Moto3 tras siete años, Carrasco se encuentra en pleno proceso de readaptación. Tras dos test y dos carerras, le piloto pone rumbo al GP de Argentina con el objetivo de entender la moto y ser competitiva lo antes posible. Motorbike Magazine ha tenido la posibilidad de hablar con la murciana sobre su papel como mujer dentro del deporte, su decisión de dejar el Mundial de Sperbikes y su nueva etapa en Moto3.
Pregunta: ¿A qué prejuicios te has tenido que enfrentar como mujer en tu carrera deportiva?
Respuesta: «Bueno, ha sido muy complicado encontrar gente que creyera que podía ganar y que me diera medios para poder hacerlo. La falta de oportunidades. Lo que Midas está intentando conseguir con la campaña Ellas conducen, es precisamente evitar eso y darle la oportunidad de salir a la carretera a mujeres que hasta el momento no han podido por el simple hecho de ser mujeres. Al final está claro que, si todos tuviéramos las mismas oportunidades y herramientas, todos seríamos capaces de conseguir lo mismo. No se trata de ser hombre o mujer, se trata de trabajo y de una igualdad de oportunidades».
P: El estudio dice que un 50% de mujeres han recibido comentarios sexistas en referencia a su conducción, ¿recuerdas alguno que te hayan hecho a ti?
R: «Estoy segura de que la gente tendrá mil opiniones y que habrá comentarios de todo tipo, pero la verdad es que a mi directamente nunca me han hecho un comentario de este tipo de forma directa. Compitiendo me he sentido siempre cómoda, nunca he tenido problemas de ese tipo con nadie».
P: También dice que las mujeres cometemos menos infracciones porque somos menos temerarias, menos valientes. ¿Qué opinas?
R: «No es cuestión de ser valiente o no. Yo creo que en general es cierto que las mujeres pensamos más antes de hacer las cosas, no nos guiamos tanto por el instinto, sino que somos un poco más racionales. Eso también se nota a la hora de conducir, somos más prudentes y respetemos más las normas. Los hombres no piensan tanto como las mujeres y yo creo que por eso conduciendo acaban haciendo más infracciones que nosotras».
No se trata de ser hombre o mujer, se trata de trabajo y de una igualdad de oportunidades
P: ¿Qué crees que se puede hacer para que más chicas logren llegar hasta donde has llegado tú dentro del motociclismo?
R: «Al final hay tan pocas mujeres simplemente por probabilidad. Hay muchas menos chicas que practican este deporte y por lo tanto más difícil que lleguen a campeonatos como el mundial. Es un trabajo de muchos años y de que la gente apueste por ti sin ser relativamente nadie».
P: ¿Y qué se puede hacer para incentivar que más niñas se inicien en este deporte?
R: «En mi caso, tengo que intentar conseguir los mejores resultados posibles para dar visibilidad y conseguir que para las siguientes el camino sea más fácil. Así seguramente habrá más oportunidades. También así las niñas pueden ver una mujer en la tele en este deporte, que vean que también estamos en el Campeonato de España, en el Mundial de Superbikes o en el de MotoGP, y se animen a empezar a practicar este deporte».
P: ¿Ha cambiado algo desde que empezaste a ahora?
R: «Mucho. Creo que ahora hay muchas más niñas que lo practican. Sí que es verdad que es muy difícil aún llegar al mundial, porque depende de muchos factores, no solo trata de ser un piloto bueno o malo… Pero bueno, es cierto que ahora se ven muchas más niñas en el Campeonato de España o en campeonatos territoriales, y al final eso es lo que hace que crezca la base. Pero está claro que es muy importante que en todo ese proceso de aprendizaje se les de oportunidades y medios para poder crecer y competir con las armas que les permitan conseguir buenos resultados».
P: ¿Como ha sido difícil deshojar la margarita para tomar la decisión de dejar el paddock de Superbikes?
R: «Bastante. Llevaba mucho tiempo y la verdad es que desde el primer día me sentí muy bien, se me ha valorado mucho como piloto, algo que no había encontrado antes en ningún sitio. Además, llevaba muchos años con Kawasaki, con Provec, prácticamente eran mi familia y sí que es cierto que renunciar a todo eso ha sido complicado. Pero me llegó la oportunidad de ir al Mundial de Moto3, a un equipo ya conocía porque competí con ellos en 2015. Entrar a un sitio donde ya conoces a la mayoría, sabes cómo trabajan, sabes que son buena gente y que además son competitivos, me ha ayudado a tomar la decisión. La oportunidad de volver a Moto3 ya se nos había presentado en otras ocasiones, pero nunca había llegado un proyecto que de verdad creyera que merecía la pena cambiar por todo lo que tenía en SBK».
Renunciar a todo lo que tenía en SBK ha sido complicado
P: Después de dos carreras y dos test, ¿en qué punto de adaptación te encuentras?
R: «Pues la verdad es que aún me falta mucho trabajo por hacer, sí que es cierto que cada vez que me subo a la moto, voy más rápido y soy más competitiva, pero aún nos queda mucho camino para llegar a estar donde creo que podemos estar este año. Estas carreras han sido positivas porque me he ido acercando a los pilotos de cabeza, pero creo que será a partir de mitad de temporada cuando seguramente pueda dar un paso hacia delante y empezar a conseguir mejores resultados».
P: ¿Está siendo más fácil o más difícil de lo que esperabas?
R: «Sinceramente, vine sin expectativas. Al final llevaba 7 u 8 años sin subirme a una Moto3 y compitiendo con una moto totalmente diferente. Si miras la categoría de Moto3 hay muchos pilotos que llevan 8 o 9 temporadas en la categoría, que conocen la moto, el equipo, los circuitos, lo conocen todo… Sabía que iba a ser un proceso complicado, que estoy intentando acortar lo máximo posible, pero intento no ponerme expectativas. Cuando cambias todo, y es todo nuevo, nunca sabes si va a ir bien o te va a costar más, pero sí que estoy tranquila y contenta porque creo que estamos trabajando bien y acabaremos llegando».
P: ¿Qué está siendo lo más difícil de esa adaptación a nivel de pilotaje?
R: «Sobre todo que las reacciones de la moto son muy diferentes. La moto de calle es una moto que entrega potencia mucho mas suave, es más dócil, los movimientos no son tan agresivos. La moto3, como es una moto de carreras, es todo potencia y aceleración, la forma de pilotar es totalmente diferente. Lo más difícil es encontrar el límite, y es cierto que aún no se bien donde está».
P: Sin embargo, las carreras de Supersport 300 y Moto3 son muy similares, locas y llenas de adelantamientos, ¿las afrontas de igual manera?
R: «Sí, al final el tipo de carrera es prácticamente lo mismo, carreras de grupo, de rebufo y de contacto. Vengo de la categoría más difícil en ese sentido porque éramos muchos pilotos en la parrilla y los grupos eran muy largos. En Moto3, aunque sea el mismo estilo de carrera, somos menos y eso también ayuda a que sea un poco más sencillo el hecho de ir en grupo. Pero al final, para ganar carreras tienes que manejarte bien en la pelea».
Si yo hubiera tenido la ayuda que se está dando ahora, el camino habría sido más fácil.
P: ¿Cuál es el objetivo de este año?
R: «Realmente no nos lo hemos marcado. Es difícil saber hasta dónde vamos a poder llegar. De mitad de temporada en adelante creo que podemos luchar siempre en los puntos, pero a día de hoy no se si seremos capaces de hacer Top10 o Top5. Aunque ya conozca la categoría, ha pasado mucho tiempo y es como si fuera el primer año, por lo que hay que intentar coger experiencia y ser lo más competitiva posible, pero no me he marcado un techo».
P: José David De Gea hace un par de décadas, luego Juanfran Guevara y tú... Y ahora el motociclismo murciano es una cantera tremenda. Además de ti, están Pedro Acosta y Fermín Aldeguer, vienen por detrás otros como Álvaro Carpe o Máximo Martínez... ¿Que se está haciendo en Murcia para este boom?
R: «Ha habido un cambio y se ha empezado a ayudar a los pilotos. Yo nunca había recibido apoyo de la Comunidad, la única institución que me había ayudado era la UCAM. Desde hace un par de años la Comunidad se está involucrando mucho en este deporte, han visto que hay mucha gente que puede ser muy competitiva y que tiene talento para llegar lejos. Este es un deporte en el que se necesitan medios, si no, no se puede competir. Hace 5 años solo estábamos Juanfran Guevara y yo y era todo a nivel personal, con la familia. Nos costó mucho llegar a los dos. Ahora la comunidad está ayudando a Pedro Acosta, a Fermín y a los pilotos que vienen. Si nosotros hubiéramos tenido esa ayuda en su día, el camino habría sido más fácil».