El despiste lastró la carrera de Rins en Qatar
«Desde luego que el responsable del motor en Japón se estaría tirando de los pelos», dijo Álex Rins, que no activó este sistema electrónico encargado de regular las rpm en la salida (no confundir con el Holeshot) y tuvo que ir a contracorriente tras perder puestos en la arrancada.
Dentro de los múltiples aspectos que han de tener en cuenta los pilotos de MotoGP en la salida, hay un botón en la piña del semimanillar que es de gran ayuda para hacer una salida lo más perfecta posible, algo fundamental en una carrera teniendo en cuenta el nivel de igualdad que se vive actualmente en MotoGP.
Ese botón es el 'Launch Control', una ayuda electrónica que, entre otras cosas, gestiona y regula las revoluciones del motor para que la salida sea mucho más precisa. Explicado a grosso modo, este sistema permite que los pilotos pueden abrir gas a tope y sólo centrarse en controlar el embrague, mientras que el Launch Control se encarga del resto; la electrónica se combina para controlar el rango de rpm y que la moto no patine, complementándolo con la ayuda del anti-wheelie para que no se levante la rueda delantera. Es un sistema que utilizan absolutamente todos los pilotos, aunque hay quienes rehusaban usarlo, como era el caso de Dani Pedrosa, que prefería salir teniendo él más control sobre el puño del gas.
No hay que confundir el Launch Control, sistema electrónico que se utiliza desde hace muchos años en MotoGP, con el 'Holeshot', ese dispositivo de salida que se ha puesto tan de moda en las últimas tres temporadas y que se encarga de hundir el tren delantero, el trasero, o los dos para buscar más tracción en la arrancada.
Pues bien, en el caso de Álex Rins, el piloto de Suzuki comenzó la temporada lastrado por el Launch Control. Al barcelonés se le olvidó activarlo antes de comenzar y esto condicionó su carrera: en lugar de ganar posiciones como acostumbra a hacer en las salidas, perdió puestos, tuvo que forzar más de la cuenta y acabó destrozando los neumáticos, lo que le hizo perder fuelle en las últimas vueltas hasta acabar sexto.
«La verdad es que ha sido una carrera muy dura desde el inicio, en el que me he olvidado de poner el botón del Launch Control, que es lo que nos regula las revoluciones para salir. He tenido que recuperar mucho, porque normalmente ganamos posiciones en salida, pero en este caso he perdido una. A partir de aquí he intentado hacer mi carrera, tirar, hacer adelantamiento estratégicos, con los cuales podía abrir un pequeño hueco para que no me lo devolvieran en la recta tanto la Yamaha como la Ducati. Ha sido una lástima al final, porque hemos destrozado los neumáticos. Faltando seis vueltas para el final, veía que se me iban las dos ruedas al abrir gas, así que tenía que rodar con mucho cuidado», expresó Rins tras acabar sexto en Qatar.
Al no tener activado el Launch Control, no pudo regular el rango de rpm óptimo para la salida, revolucionando el motor algo más de la cuenta. Cree que este despiste no ha pasado desapercibido para los técnicos de Suzuki: «La persona responsable del motor en Japón se estaría tirando de los pelos, desde luego, porque cada vez que vamos un poco pasados y tocamos el limitador nos llega un mail de Japón para que vayamos con cuidado. Si le sumas los cuatro o cinco segundos que ha estado el semáforo en rojo...», decía resignado el barcelonés.
Pese a este imprevisto, Rins volvió a hacer otra buena remontada y fue uno de los grandes protagonistas de la carrera. Acabó sexto y con deberes pendientes para el GP de Doha: «Tenemos que clasificar un poco mejor y, aunque será complicado, tenemos fe. Y así intentar hacer una carrera estando desde el principio en el grupo de cabeza», remató.